Héctor “Caramelo” Chávez se ha convertido en un ícono entre los aficionados de la Selección Mexicana gracias a su incondicional apoyo por más de tres décadas, desde que quedó prendado del Tri en México 1986. Desde el Mundial de Estados Unidos 1994 no se ha perdido ni un partido y ha seguido al equipo por todo el mundo.

En su característico sombrero luce algunas de las banderas de los países que ha visitado alentando a México. También destacan los logos de los Mundiales Brasil 2014 y Alemania 2006. Su mayor insignia es la palabra “Caramelo” junto a la bandera nacional en la parte frontal.

Caramelo relata que su apodo nació en la prepa cuando sus amigos lo llamaban así por ser “un caramelo” cortés y amable con las mujeres. De ahí deriva su fama y leyenda como el aficionado más emblemático de la playera verde.

Ha vivido grandes gestas con el Tri, pero también dolorosos fracasos. Sus partidos favoritos son cuando derrotaron a Brasil en JO, la Confederaciones 1999 y frente a Alemania en 2018. Pero aún duele la eliminación de 2002 ante EU.

Seguir a la Selección Mexicana implica enormes sacrificios

Antes conseguía boletos baratos sobre la marcha, pero con una afición cada vez más numerosa internacionalmente, los costos se han elevado mucho. Sin embargo, su amor por el Tri no tiene límites.

Trabaja duro para solventar gastos y ha logrado el apoyo de algunos patrocinadores. Dice que mientras tenga salud y empleo seguirá alentando al Tri allá donde se presente. Es la pasión hecha persona.

¿Por qué Héctor ‘Caramelo’ Chávez podrír a la cárcel?

Pero ahora Caramelo enfrenta un posible proceso legal por presuntamente alterar símbolos patrios como la bandera nacional, situación que busca evitar la reforma a la ley sobre el Escudo, Bandera e Himnos Nacionales.

La diputada Elizabeth Leyva de Morena ya lo mencionó como ejemplo de posible infracción por colocar textos y marcas en la enseña verde, blanca y roja que tanto venera. De aprobarse, podría ser multado o encarar hasta 4 años de cárcel.

Sería una enorme injusticia que el aficionado más emblemático y fiel de la Selección Mexicana termine tras las rejas por demostrar de forma apasionada su cariño hacia el equipo nacional. Habrá que ver si prosperan esos cargos en su contra.

Pase lo que pase en el ámbito legal, Héctor “Caramelo” Chávez ya es toda una leyenda para la afición mexicana y un personaje inmortal en la historia de la Selección Nacional. Su amor y entrega durante 35 años así lo confirman. Un superfan para la posteridad.