La Federación chilena pagó al técnico Jorge Sampaoli y a sus dos ayudantes seis millones de dólares por ganar la Copa América en cuentas de un paraíso fiscal, según reveló Ciper.
El abono se hizo en tres sociedades constituidas en las Islas Vírgenes por el concepto de derechos de imagen y no como premio, todo con el propósito de pagar menos impuestos. La Asociación Nacional de Futbol Profesional desembolsó posteriormente unos 500.000 dólares para regularizar el contrato ante el Servicio de Impuestos Internos.
La operación la fraguó el ahora expresidente de la ANFP, Sergio Jadue, involucrado en los escándalos de corrupción de la Conmebol, y los seis millones de dólares de premios se repartieron entre Sampaoli (tres millones), el ayudante técnico, Sebastián Beccacece, y el preparador físico, Jorge Desio, con 1,5 millones cada uno.
Según Ciper, la principal irregularidad es que se modificó el verdadero motivo del pago para desembolsar menos dinero en impuestos. Jadue había tratado de convencer a Sampaoli para que él y su equipo se hicieran cargo de los 500.000 dólares adicionales para regularizar la situación tributaria de la operación, a lo que el técnico argentino se negó argumentando que la fórmula había sido ideada por la ANFP.
Los millonarios premios para Sampaoli y sus colaboradores han causado polémica en Chile porque eran desconocidos y fueron negociados con recelo entre Jadue y el entrenador. Sergio Jadue abandonó Chile el pasado 17 de noviembre y se puso a disposición de la justicia de EE.UU. después de admitir que recibió sobornos en la adjudicación de los derechos comerciales de las Copa América hasta 2023.