Por Nardo Záizar
Una marca de relojes unió a dos auténticos monstruos en la historia del deporte, Diego Armando Maradona y Usain Bolt. A la leyenda jamaicana de la velocidad se le hizo jugar una reta con uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos.
Como parte de la publicidad también tuvieron que participar en una sesión de fotos junto a José Mourinho. Fue entonces que le pegaron en el ego al defecto de D10S, su estatura. Para no verse tan chaparrito junto a la torre que es Usain, Maradona recurrió a lo que encontró primero, un maletín de utilería para subirse en él y ganar unos centímetros.
Pero lo importante para Bolt era saber la opinión del Pelusa sobre su rendimiento en la cancha, a lo que Diego le hizo saber que tiene nivel, que puede estar tranquilo con ese tema.