Como se podía esperar al ser un equipo mundial mente reconocido, la llegada del Madrid al aeropuerto de Japón estuvo plagada de policías, quienes impidieron a los aficionados acercarse con los futbolistas para tomarse fotos.
La medida tomada por los elementos de seguridad fue poner un doble cordón en el área asignada para el paso de los futbolistas y acomodar a varios agentes a lo largo de la misma, con la finalidad de no molestar a los jugadores y evitar distracciones previo a su duelo contra el mejor equipo del mundo: el América (#AYSINO)