Lo dijo Gustavo Matosas hace unas semanas. Su directiva se lo tomó muy en serio. Atlas sueña con la vuelta del hijo pródigo, con Rafael Márquez. Se fue hace 16 años del club. Lo hizo por la puerta grande. El retiro cada vez toca más fuerte a su entrada. Él ha dicho que volver a casa no está descartado.
El gusto de Atlas por Rafa es tal que ESPN asegura que lo quieren en enero. Una vez que el mercado de invierno se abra irán con todo para que sea su refuerzo estelar del Clausura 2016. Sólo le quedarán seis meses más de contrato con el Hellas Verona. A él le toca decidir cuándo vuelve.
También él dirá cuánto tiempo se queda. Los de Guadalajara esperan que acepte cuando menos un año. Después, él determinará si extiende o no su contrato.
Matosas ya lo dirigió. Ambos fueron bicampeones en el Apertura 2013 y Clausura 2014. Cuando firmó con León y después del Clausura 2013 daba la impresión de que su carrera iba estaba cerca del fin. Gustavo la revivió. La Selección Mexicana se fijó en él otra vez y Europa fue su siguiente destino.
