Hablar del Real Madrid en los últimos nueve años es hablar de Cristiano Ronaldo. Desde que lo presentaron un 6 de julio de 2009 se ganó el cariño de su afición, se convirtió en un histórico del madridismo y en estos días podría decir adiós.
Ese 6 de julio el Santiago Bernabéu abría sus puertas para recibir a la afición que quería ver por primera vez a Cristiano Ronaldo con la playera merengue y vaya que fue bastante, 85 mil personas vieron a su nuevo ídolo, quien llegaba a cambio de 100 millones de euros, en ese entonces el fichaje más caro de la historia.
Ese día, CR7 entró a un estadio repleto que se entregó a él, como lo haría cientas de veces después. Florentino, Eusebio y Di Estéfano ya lo esperaban para que diera sus primeras palabras como merengue: “Hala Madrid”.
A partir de ahí, el romance del Comandante y el Madrid creció y se convirtió en una historia de éxito. Entre los dos ganaron 16 títulos (seis en España y 10 a nivel internacional); de sus cinco Balones de Oro, cuatro los ganó como madridista.
Pensar que ahora la relación entre los altos mandos del Real con Cristiano ya no es la misma que cuando llegó es algo increíble y que esto podría desencadenar en su salida del equipo blanco.