Stephen Curry y LeBron James, dos nombres que han dominado la NBA en la última década, han protagonizado una rivalidad que ha dejado una huella imborrable en la historia del baloncesto.

Aunque ambos jugadores mantienen una relación amistosa fuera de la cancha, sus enfrentamientos en la cancha han sido épicos y recordados por todos los amantes del baloncesto.

Entre 2015 y 2018, los Golden State Warriors de Curry y los Cleveland Cavaliers de LeBron se enfrentaron en cuatro finales consecutivas de la NBA. Tres de estas finales fueron ganadas por los Warriors, pero las Finales de la NBA de 2016 son recordadas como las más icónicas debido a la actuación de LeBron James.

LeBron y Curry: Más que rivalidad, respeto mutuo

A pesar de la intensidad de sus enfrentamientos, LeBron y Curry han mantenido una relación de respeto y admiración mutua. “Es un gran tipo, un gran amigo, un gran competidor”, ha dicho Curry sobre LeBron.

Esta relación se remonta a 2008, cuando un joven Curry se presentó al mundo durante un juego de la NCAA y LeBron, impresionado por su talento, asistió a uno de sus juegos.

LeBron James: Mentor inesperado de Stephen Curry

En una reciente entrevista con Sports Illustrated, Curry reveló que LeBron ha sido una figura importante en su carrera, incluso ofreciéndole consejos durante sus primeros años en la NBA.

“Es complejo, porque pasas de jugar en el torneo, él viniendo a verme entrar como un joven novato en la liga y me dio consejos sobre cómo superar algunas de las primeras dificultades por las que iba a pasar como jugador”, compartió Curry.

Una rivalidad única en la historia de la NBA

La rivalidad entre LeBron y Curry es única en la historia de la NBA. “Será muy difícil encontrar dos equipos que se enfrenten cuatro veces seguidas en las Finales por el panorama de la NBA… Esa racha irá a la historia como unos cuatro años sorprendentes”, reflexionó Curry.

Esta rivalidad ha cimentado a LeBron James y Stephen Curry como dos de los mejores jugadores en la historia del baloncesto. Para los aficionados, solo queda disfrutar de su grandeza y rivalidad deportiva, que seguirá resonando en la historia de la NBA.