Por Nardo Záizar
La lesión de Leroy Sané por parte de Joe Bennett hizo que Josep Guardiola alzara la voz en favor de la integridad física de los futbolistas. Enojado por ver a su muchacho caído en partido de la FA Cup, el buen Pep no se guardó nada para pedir en conferencia de prensa que se cuide a los artistas del balón, tarea que en gran medida corresponde a los árbitros, encargados de procurar el buen comportamiento de los jugadores en una cancha.
Al llamado de Guardiola, quien fue contundente al precisar que los silbantes tienen como principal obligación el proteger a los futbolistas, se sumó la prensa deportiva, específicamente la inglesa. The News, por ejemplo, dedicó su portada de Deportes al caso comparándolo con otra acción sancionable como fue el escupitajo de Masuaku a Nick Powell en el partido entre West Ham y Wigan.
La unión entre la gente del futbol y el periodismo ha llamado la atención, sobre todo si tomamos en cuenta que se aproxima la Copa del Mundo, un evento al que tienen posibilidad de asistir elementos como Sané, que es seleccionado alemán.