Tigres va por otro jugador del mercado europeo, se trata del defensa central paraguayo, Gustavo Gómez, que juega en el Milan.
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Gómez no ha contado con muchos minutos en Italia y buscaría salir. Pero Tigres no es el único interesado, Boca Juniors también lo quiere, porque su entrenador Guillermo Barros Schelotto lo dirigió en Lanús.
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¿Adivinen por qué los felinos llevan ventaja para comprarlo? Obvio, por el dinero. Tigres está dispuesto a pagar los seis millones de euros que piden, y Boca lo quiere más barato.
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