Por primera vez desde su despedida, Pep Guardiola volverá al Camp Nou. Hace tres temporadas dejó el sitio libre en el banquillo, mismo que Gerardo Martino y Luis Enrique han ocupado en busca del éxito anhelado también en la tribuna tras la partida del hombre que los guió a ganarlo todo.
Hoy, el Bayern Munich es el motivo de Guardiola, quien seguirá cada movimiento de los catalanes e ingleses, tomará nota en caso de que alguno de los dos sea su próximo reto en Champions League. Pero intentará ser uno más en la noche vital del Barcelona, la que Luis Enrique ha puesto por encima del Clásico, va a ocupar el palco designado a su abono y su familia estará con él.
Sin embargo, parece imposible que el ex blaugrana pase desapercibido, cuando fueron reyes de Europa en 2009 y 2011 bajo su mando. Esta competencia que con el recuerdo sólo les provoca sonrisas.
Pep aprovecha el descanso que otorgó al equipo alemán luego de su victoria en Bundesliga y la aplastante clasificación en Champions. Esta noche, en el Vicente Calderón, el Atleti se juega el pase que hasta ahora lleva perdido con el Bayer Leverkusen, y también está prevista la asistencia de Guardiola.
Con otra camiseta bajo el saco y con la profesionalidad característica, pero regresará.
