El nuevo entrenador de la Selección Mexicana asume el reto que tiene al frente. Lo hace con optimismo. Si Juan Carlos Osorio aceptó hacerse cargo del equipo es porque está más convencido que nunca. “El grupo actual es una generación con mucho potencial”, asegura.
Charla con Televisa Deportes vía La Jugada. Se le nota feliz por su nuevo trabajo. Habla de “nosotros”, rara vez lo hace de sí mismo. Él no es sin su Cuerpo Técnico. Tenía estudiado al combinado que hoy dirige. Al menos a sus antecesores. “Estoy de acuerdo con la opinión del Profe Miguel (Herrera) y con Ricardo (Ferretti). El grupo actual es una generación con mucho potencial, con un futuro muy grande”.
Al mismo tiempo admite que él y sus colaboradores tienen mucho que aprender. “Estamos . familiarizándonos con los jugadores, con la liga”, añade. Se le ha visto en dos partidos del torneo local. Esta misma semana viajará a Europa a entrevistarse con los legionarios.
Tiene claro cómo jugará. Todavía no con quienes contará. En base a lo que observen él y sus ayudantes “vamos a elegir la estructura, los jugadores y la forma de jugar”.
Tiene una idea base. El equipo será ofensivo. Alaba el trabajo de Miguel Herrera y su línea de tres al fondo. “En Sudamérica se considera muy defensivo jugar así, pero México demostró en el Mundial de Brasil que sus laterales tienen mucho juego al ataque y eso vuelve al sistema muy ofensivo”. considera. “Nos identificamos y creemos que se puede jugar así, pero con un 4-3-3”, agrega.
Advierte que su idea de no repetir una alineación jamás se mantendrá. Da la razón: “todos los rivales son diferentes, incluso cuando se juega contra el mismo equipo”. Para él, además, “todos merecen una oportunidad”. Está dispuesto a dársela a quien se la gane.
Elogia al futbolista mexicano. Lo considera “combativo”, dado al “sacrificio”. Recuerda que en los 80's, cuando llegó a Estados Unidos, vio de cerca a quienes trabajaban en la construcción. Eso fue en la zona de Nueva Jersey y Rhode Island. En 2012, con Puebla, lo comprobó. Por eso siente tanta “afinidad” hacia su modo de jugar.
Tuvo otras ofertas de selecciones nacionales
Revela que México no fue la única selección que le ofreció una oportunidad para dirigirla. Rechazó todas las anteriores. De dinero no habla. Se concentra en que “No sentíamos que teníamos la misma afinidad como la tenemos con los mexicanos”
Sampaoli, el ejemplo
Entiende las críticas, las acepta. Está dispuesto a cambiarlas por elogios. “Vivimos en una democracia. El futbol es un deporte de opiniones”, admite.
Siempre ha sido cuestionado antes de hacerse cargo de un club. Recuerda que le pasó cuando fue de Colombia a Inglaterra, a Estados Unidos, de regreso a su país, luego a Brasil.
Menciona a Jorge Sampaoli. Él tampoco se hizo cargo de una selección antes de dirigir a Chile. Hoy el tiempo y los resultados le dan la razón: “nuestra idea es hacer algo similiar”, concluye.