Ya se volvió tendencia no saber perder o atacar nada más porque sí, ahora fueron los aficionados de Santos que al termino del partido se lanzaron a donde estaba el bus de los Rayados para sacarles un susto y lanzar unas cuantas pedradas, ¡Aplicaron un River!
El equipo se disponía a abandonar el TSM cundo todo ocurrió, la ventana trasera resultó visiblemente dañada, era el lugar que ocupaba Dorlan Pabón/Avilés Hurtado. Vidrios rotos quedaron al rededor de los asientos, por suerte no pasó a mayores.
Sí que es lamentable, se debe entender que solo es futbol y no hay porque agredir al rival, mucho menos si son jugadores, hay que volvernos tendencia por buenas acciones, no con cosas como las de los pseudoaficionados de River.
TRISTE. LAMENTABLE.
— Diego Armando Medina ? (@dgoarmando) December 2, 2018
DEPRORABLE.
Afortunadamente no pasó a mayores… pic.twitter.com/ynH54uBrzl