Dos meses, estamos tan sólo a dos meses de Qatar 2022, y si hay un jugador que cada que juega mete más y más miedo es Messi. El GOAT la está reventando toda, y no sólo con su Selección, sino que también lo está haciendo con el PSG. La temporada pasada muchos decían que Messi estaba acabado, que ya no tenía más que dar, que debería irse a la MLS… qué equivocados estaban.
Lo de Messi es simplemente descomunal, tremendo, soberbio, pero ¿de verdad esto nos sorprende? Estamos hablando del mejor jugador de la historia, estos números son cosa de cada día para él, desgraciadamente para nosotros los mortales, son una bestialidad.
La Pulga cumplió 35 años hace tan sólo tres meses, muchos jugadores a esa edad ya están pensando en el retiro, pero Leo no. Desde que inició la temporada, Messi ha jugado 13 partidos juntando PSG y Argentina, y en ellos, se ha rifado 10 goles y 8 asistencias. Estamos hablando que en los 13 partidos que lleva de la temporada, Messi ha participado activamente en 18 goles.
Ahora si lo especificamos a su club y a su Selección, Messi ha jugado 11 partidos con el PSG, anotando seis goles y asistiendo ocho veces. En la Albiceleste, Leo ha jugado únicamente dos partidos y marcado cuatro goles. Qué el dios del futbol se apiade del Tri y de todas las Selecciones, que Messi anda fino, y todos sabemos lo que pasa cuando el GOAT está así.
¿Cómo será el camino de Argentina en Qatar 2022?
Como ya sabemos, Argentina compartirá el Grupo C con nuestro querido y amado México, Polonia y Arabia Saudita. Su debut será precisamente contra los árabes el 22 de noviembre a las 4 de la mañana. Después se viene el choque de choques, el 26 de noviembre Argentina y México chocarán a la 1 de la tarde. Y para cerrar el grupo, la Albiceleste disputará su juego frente a Polonia el 30 de noviembre a la 1:00 pm.
Si todo sale como se supone, Argentina debería avanzar como primero de grupo y México como segundo. Pero vamos, no perdamos las esperanzas de poderle ganar a Messi y compañía. Como ya lo dijo mi Chicha una vez… ¡Imaginemos cosas ching*nas!