Por: Fernando Castillo
El día de hoy vimos un nuevo empate entre Pumas y Chivas en casa del equipo universitario, pensando en estos recurrentes resultados, nos pusimos a reflexionar en los puntos buenos y malos de enfrentar un partido con estas características en el Olímpico Universitario.
El horario siempre será un pro para Pumas que a lo largo de varios años, ha sabido más o menos “dominarlo”, conoce el campo, la humedad y la temperatura que se presenta en juegos así; para los rivales siempre será en contra porque enfrentar el calor de la CDMX no es algo fácil, y menos hacerlo durante más de 90 minutos; si eres el América, puedes decir que en ese escenario tú eres el dominador y no el dominado.
Además, un estadio tan grande, históricamente hablando, siempre sirve para motivar a los jugadores y en muchos casos sacar lo mejor de ellos. Juego en CU es sinónimo de buen juego, a menos que sea contra Chivas que suelen ser aburridos empates.
En la Ciudad de México existe una gran cantidad de aficionados y no sólo de los equipos capitalinos. Suele ser un estadio familiar y ya sea en futbol u otra disciplina que ahí se presente, asegura un buen espectáculo para todos los asistentes.
Y por último, es el único estadio ubicado en una zona declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, la tan reconocida Ciudad Universitaria de nuestra siempre querida y galardonada UNAM. Jugar pensando en esto, debe ser un momento de reflexión para cualquier persona que pise su césped y salga a demostrar el amor por el deporte mexicano.
¿Qué dicen ustedes Juanáticos? ¿Ven más beneficioso o contradictorio jugar en CU a las 12 del día? También hay que agregar que terminando el juego, siempre podrás disfrutar de la gastronomía, cultura e historia de nuestra capital.
