¡Se acabó! No hay más opciones para los clubes mexicanos y este martes se esfumó la última esperanza de ver a alguno de los 18 equipos mexas coronarse en la presente edición de la Legues Cup.
Sí, éramos 18 equipos de la MX peleando contra los clubes de la MLS un espacio en la gran final, pero luego de todas las rondas eliinatorias, solo los equipos estadounidenses tuvieron el privilegio.
Campeón estadounidense
El Inter Miami y el Nashville SC serán los protagonistas de la final de este torneo binacional que ha tenido como principal estrella a Lionel Messi, brillando desde la fecha uno y hasta el último partido; seamos honestos, este torneo le ha quedado chico al astro argentino.
Y es que desde que empezó el certamen la cosa comezó a pintar mal para nosotros los mexas y de a poco empezaron a caer los llamados clubes grandes de nuestro país.
Equipos menos vistosos como Puebla, Santos, Tijuana, Necaxa y Atlético de San Luis decían adiós rápidamente; posteriormente, Pumas, Chivas, Cruz Azul, América y otros tantos más se fueron despidiendo de la competencia prematuramente, sin embargo, nuestro ego u orgullo nos impedía aceptar que algo andaba mal y que los equipos norteamericanos llegaban mejor preparados y con mejor nivel.
En un abrir y cerrar de ojos, la representación mexicana se transformó en dos participantes: Querétaro y Rayados, las opciones para seguir con vida eran pocas y finalmente el oxígeno se acabó, cumpliendo el presagio que se marcó desde el inicio.
Para México ha sido sorpresivo, al menos eso parece desde la óptica del aficionado, aunque para muchos de los periodistas deportivos que cubren este bello deporte, todo esto es el justo premio para el nivel mexicano.
Se habla de menosprecio, de desinterés, de mal arbitraje y de bajo rendimiento, lo cierto es que es momento de reconocer que la MLS nos pintó la cara y nos dejó en ridículo en un torneo que creíamos tener en el bolsillo.