La fiesta que armaron nuestros muchachos de la selección sigue dando de qué hablar, pero esta vez para bien de uno de los seleccionados que aprendió la lección y no fue parte del grupito del escándalo.
Según el Francotirador de Récord, Cracklitos ya no cometerá el mismo error después de lo que pasó hace unos años en una situación similar en Monterrey. Aquella vez fue juzgado de fiestero y comenzó su mala relación con el equipo nacional.
Ahora tomó la inteligente decisión de no acudir a la pachanga para mejor dedicarse a invertir su tiempo en otra cosa; hoy en Dinamarca él está tranquilo a diferencia de lo que viven sus compañeros. La neta es que después de Brasil hemos visto que Vela ha cambiado mucho, se le ve mayor compromiso y que la madurez tanto dentro como fuera de la cancha lo alcanzaron.