Por Alejandro Miranda
Los Tiburones Rojos del Veracruz quieren quedarse en primera e igualar a los grandes con sus famosas invasiones. La victima será ni más ni menos que Puebla en un auténtico duelo por no descender.
Toda la plebada de los Tibus ya pidieron cerca de 10 mil entradas para visitar, atiborrar y desquiciar el Estadio Cuauhtémoc, siendo pocas las veces que hemos visto esto en equipos con un nivel muy bajo, hasta parece chiste.
La gente ya entendió que es hora de apoyar, de no rendirse y luchar hasta el final, quieren pintar todas las butacas de rojo y sentirse locales. En caso de armarse la invasión, tendrían un lugar en el selecto podio de aficiones como la de Tigres contra San Luis en 2011 que llevaron a 25 mil fans.