Parece que al Azul le gusta tener la paternidad de equipos que vistan de amarillo, pues no sólo el América les tiene tomada la medida, Tigres también ha sumado una buena racha sin conocer la derrota ante los celestes.
La última vez que Cruz Azul le ganó a los felinos fue en el lejano Clausura 2015 (2-0), a partir de ahí la máquina suma seis partidos sin conocer la victoria con cuatro empates y dos descalabros.
Si el Azul quiere demostrar que este año es el bueno, deberán limpiarse la malaria que acumulan cada vez que enfrentan a Tigres, un equipo que también llega al Azteca con paso perfecto.