Por José Méndez
Se jugó la ida de la primera final de la liga femenil, Chivas y Pachuca nos regalaron un partido emocionante, digno del gran torneo inaugural. Nos demostraron que son los equipos de México, al menos en el futbol femenil. Un juego de ensueño para las futbolistas, con un estadio Hidalgo con récord de asistencia, la afición entregada a su equipo. Ellas en correspondencia dejaron todo en cada pelota.
La liga fue de menos a más, una competencia que toma forma y que se consolida para aumentar el nivel del futbol femenil y formar una selección más competitiva. Pachuca y Chivas son dignas finalistas, con proyectos ambiciosos, como ya nos tienen acostumbrados Jesús Martínez y Jorge Vergara.
Las jugadoras se entregan por su camiseta, piden a gritos que se les tome en serio. Como la final, todo el torneo estuvo lleno de partidos con espectáculo y diversión. Desde la jornada 1 nos regalaron futbol de calidad, no se esperaron a que llegara la Liguilla para empezar a jugar ¡Verdad hombres! Por eso brindemos la oportunidad a las mujeres y apoyemos su futbol.
Con los equipos finalistas se viven realidades encontradas. Los equipos varoniles no clasificaron a la fiesta grande. Las mujeres nos demostraron que Pachuca y Chivas sí son los equipos de México. Canteras nutridas, esquemas de valores enfocados en resultados, proyectos productivos y estables.
No importa quien sea campeón el próximo viernes el espectáculo lo tenemos asegurado. Unas Chivas con ganas de remontar y ser campeonas en su casa; enfrente unas Tuzitas que llegan con la ventaja y el deseo de sellar su buen torneo. Al final los verdaderos ganadores seremos todos los aficionados.