Existen cracks que no se conformaron con sólo patear el balón durante 90 minutos y entrenar todos los días, para ellos la vida debía tener un poco más de emoción, así que decidieron estudiar y dedicarse en sus tiempos libres a otras cosas. Les dejamos algunos ejemplos de los futbolistas que también tienen otra profesión.
Hannes Thór Halldórsson
Pararle penales a Messi no es lo único bueno que sabe hacer, también se le da dirigir películas y comerciales. Pareciera que el futbol sólo es un hobby, porque el estar detrás de las cámaras lo apasiona a tal grado que a veces se le olvida llegar temprano a los entrenamientos. Coca Cola es uno de sus clientes.
Juan Mata
Mandar bombones a los jugadores o perforar a los arqueros lo combina muy bien con el marketing y las Ciencias de la Actividad Física. Tanto su profesión como el deporte le permiten vender lo mejor de él y cuidarse para rendir siempre en los juegos del Man U.
Giorgio Chiellini
Para las barridas y las patadas a la bola -no sólo del tobillo- se necesita tener una maestría especial y qué mejor que una en Administración. La de gajos es una de las tantas cosas que debe saber cuidar siempre que se acerca a su área, por lo que su profesión le ayuda a saber administrar cualquier tipo de recurso para que los delanteros no pasen.
Luis Michel
El ser el portero suplente de Tijuana no le quita el sueño, sabe perfectamente que cuando llegue el tiempo de decir adiós, su título en Ingeniería Industrial y su montón de diplomados que tomó le ayudarán a mantenerse a flote y por qué no, convertirse en unos de los mejores del país.
Andrés Iniesta
El Fantasmita, aparte de ser un genio para el control del balón, también demostró que el estudio se le daba de maravilla. Fuera de las canchas se dedicó a estudiar Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, cosa que le puede dar mucha chamba después de retirarse. Además, mientras juega también le dedica tiempo a su marca de vinos.