Eduardo Chang, egresado del Instituto Politécnico Nacional, inventó un casco de futbol americano con un sistema que identifica golpes que reciben los jugadores en la cabeza, con la intención de evitar lesiones graves.
“Un compañero y amigo sufrió un fractura de cráneo hace unos años y ya no pudo jugar. Eso me generó la necesidad de crear el casco porque es necesario contar con información sobre los golpes que recibe cada jugador y que los médicos intervengan de inmediato”, explicó Chang a la agencia EFE.
Con el casco cada vez que un jugador recibe un golpe en la cabeza, unos focos LED se encienden para que los árbitros y entrenadores se den cuenta de que existe el riesgo de una lesión. El casco también cuenta con una tarjeta SD, para que se almacene toda la información de los golpes.