¡Se ganó la tercera! La final entre Francia y Argentina tuvo de todo, La Albiceleste lo dominó durante 78 minutos pero un tal Kylian Mbappé no le iba a dejar las cosas tan fácil y mandó el partido a los tiempos extras. Messi se echó el equipo al hombro en el alargue, pero Donatello mandaba todo a los penales.
Ahí, el Dibu se hizo enorme y logró que Francia fallara dos penales, el resto es historia, y después de 36 años, la Albiceleste volvió a tocar la gloria.
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Llegó la tercera estrella
Messi lo buscó durante muchos años y en Qatar hizo todos los méritos para levantar la Copa. Nadie se lo merece más que Leo, y durante la celebración ya presumieron la playera con el nuevo parche del escudo de la Selección, y es bellísima. La tercera estrella está arriba de otras dos formando un triángulo, y el loco de la AFA se ve más padre así.
Argentina volvió a la grandeza
Fueron 36 años donde la Albiceleste sufrió, donde llegó a dos finales y se quedaron en la orilla, donde pasaron jugadores, y generaciones de grandes jugadores que no pudieron. Desde 2006, Leo vio pasar a grandes futbolistas y todos se fueron, solo él se quedó, aguantó las críticas y en su quinto Mundial, logró estar en la misma mesa que el Diego.
La grandeza entre ellos dos no se compara, solo se disfruta y como aficionados a la pelota, debemos de estar agradecidos por verlos brillar. Este fue el último Mundial de Leo, y estamos viendo sus últimos años como futbolista profesional, fue un deleite verlo jugar y estamos más que felices de verlo lograr lo que más quería en el mundo.