Nadie puede negarlo, ser portero no es fácil, cargas con un paquetote, eres la última esperanza, tienes prohibido distraerte y meter la pata porque puede costar muy caro; hay algunos que se arriesgan de más, se enredan con sus piernas y terminan regando el tepache feo, para ejemplo les contamos lo que pasó hoy en el King Power Stadium.
Los Reds visitaron la casa de The Foxes, el partido lo tenían controlado los chicos de Klopp con una ventaja de dos goles, pero al minuto 63 sucedió algo que nadie se esperaba y le puso emoción al juego hasta el final.
En un balón retrasado, Alisson tuvo que salir de su área chica, siendo sinceros le habían mandado una verdadera papaya. El brasileño quiso aventarse una de lujo y recortar al delantero de los locales pero al final se hizo bolas y no supo ni donde quedó la bolita, le quitaron el balón e incluso terminó en el suelo, logro levantarse pero no alcanzó a llegar y el balón terminó dentro de su arco.
No se preocupen aficionados del Liverpool, ya no está Karius, ahora tienen a Allison Becker….. pic.twitter.com/D3Ox2nk8dS
— AlanZamora (@ZamorAlan) September 1, 2018
Becker ya se había aventado una igual la semana pasada y le salió muy bien, pero esta vez si se echó un tremendo oso, prácticamente regaló su primer gol en Inglaterra y se volvió dueño de portadas alrededor del mundo pero no de la mejor manera, su equipo afortunadamente no perdió pero Jurgen no va a estar muy contento que digamos con ese tipo de jugadas y el regaño en el vestidor seguro estuvo bueno.