Por Gustavo Ruiz
Los Tiburones Rojos de Veracruz van de mal en peor y el descenso para ellos es inevitable. Y más aún, por los malos resultados y la mediocridad de sus jugadores, es más, ni Memo Vázquez puede salvar al equipo de terminar en el último del cociente.
Por eso, la directiva busca motivar a las gente a que vaya al estadio y crea que la salvación es posible. Esta medida ya fue usada en el partido contra el Atlas. De esta manera, se busca remendar los corazoncitos rotos de sus aficionados, quienes no ven una con el equipo y no le perdonan a la directiva y jugadores el poco empeño que le echan al equipo.
Por lo mientras, los aficionados sacarán algo de provecho a la directiva e irán al partido de a grapas. Ojalá y la afición se recupere pronto del duro golpe y sigan apoyando a esta plaza de gran tradición.