Aseguró que a muchos jugadores que pasaron mucho tiempo en el futbol mexicano les han preguntado sobre sus hijos, sobre qué hacen, “me dicen que están siguiendo de cerca a Diego”; a su familia le agradaría regresar al país, incluso su esposa quisiera radicar en ciudades como Monterrey o Guadalajara.
Para Abreu no significa ningún problema que su hijo piense en cualquiera de las dos naciones como su país futbolísticamente, “bromea con que puede jugar en dos selecciones” incluso aceptó que en el Mundial de Sudáfrica cuando los uruguayos ganaron sobre el Tri, en una nota su hijo declaró que prefería apoyar a la Selección Mexicana. “Me bromearon con eso, pero bueno, que haga lo que el corazón le diga. Yo orgulloso de que siga el camino uruguayo o mexicano”.