Kevin Álvarez y el América unieron esfuerzos con TUDN para brindar un emotivo regalo a una seguidora Azulcrema sin embargo, y a pesar de que sí hicieron realidad el sueño de alguien que apoya a los de André Jardine, no todo salió como esperaban.
¿Qué pasó con Kevin Álvarez del América y el regalo que no llegó a la fan Azulcrema?
Todo ocurrió la noche de este 19 de abril durante el duelo que el América y Juárez tuvieron, y en el que las Águilas golearon a los Bravos, cuando una niña con una pancarta llamó la atención de un reportero de TUDN, lo que dio inicio a todo.
Y es que el periodista Julio “Profe” Ibáñez se topó entre la hinchada del América a una jovencita que, con un letrero hecho con un cartón y plumón negro, decía que le habían quitado la cartulina que hizo en su casa.
En esta cartulina la niña escribió que quería la playera de Kevin Álvarez, y que había elegido ir al estadio en vez de hacer otra cosa por su cumpleaños, por lo que el Profe Ibáñez puso manos a la obra.
Sin embargo y a pesar de que hizo las gestiones correctas, la playera terminó en manos de otro niño fan del América, por lo que ahora el periodista ha iniciado una búsqueda desesperada, tratando de hallar a la pequeña fan y así, cumplirle su sueño de tener de regalo de cumpleaños el jersey de Kevin Álvarez.
Por ello el periodista pidió a sus fans que, si saben quién es la niña a la que está buscando para dejarle la playera, pidió que se le contacte a través de su cuenta en X: @julioiba.
Las Águilas otra vez, imparables
Regresando con el equipo de André Jardine, las Águilas volvieron a remontar el vuelo con su victoria ante los Bravos de Juárez, luego de 5 partidos en los que los de Coapa no conocieron la victoria.
Y es que tras su eliminación de la Copa de Campeones de la Concacaf, a manos del Cruz Azul, el club entró en una “crisis”, como varios analistas le llamaron a este breve momento.
Pero luego de la victoria ante los Bravos de Juárez, está más que comprobado que, lo que para un equipo promedio sería una debacle, para las Águilas es tan solo un día más en el trabajo. ¿Huele a tetracampeonato? No. No huele. Apesta.