En el mundo del deporte, hay muchos atletas que tienen historias impresionantes. Pero hay algunos que pasaron por sucesos tan traumáticos que los marcaron desde niños. Aunque ello sirvió para mostrar resiliencia. Como le ocurrió a Andy Murray.
El ex tenista profesional sobrevivió a una masacre cuando era niño. Y ese fue un punto de quiebre en su vida. Pero no lo detuvo para ser una joya del tenis mundial y convertirse en campeón olímpico. Compartiendo cancha con algunos de los mejores exponentes de la historia como Roger Federer, Novak Djokovic y Rafael Nadal.
A sus 38 años, Andy Murray no se ha alejado completamente del deporte blanco. Pues tras conquistar victorias y títulos en las canchas, se convirtió el entrenador e incluso estuvo en el palco de Novak Djokovic. Pero siempre se le recordará como uno de los 4 Fantásticos del tenis. Esta es su historia.
La masacre Dunblane
Cuando Andy Murray tenía nueve años, ocurrió un suceso que marcó su vida para siempre. El 13 de marzo de 1996 la Dunblane Primary School vivió una mañana de terror. Thomas Hamilton, ex líder de un club juvenil ingresó al gimnasio de la institución y abrió fuego contra alumnos y maestros.
El saldo fue de 16 niños muertos y un profesor. En el lugar se encontraban Andy Murray y su hermano Jamie. Pero oportunamente fueron salvados y llevados a la oficina del director. En ese lugar, otros niños y profesores se reunieron esperando que pasara el horror.
Al enterarse de lo ocurrido, su madre Judy Murray salió corriendo hacia la escuela, donde se encontró a otros padres de familia, muy preocupados por lo ocurrido, recordó en una entrevista con ESPN. Pero la oportuna intervención de los maestros, salvó varias vidas, entre ellas, la del próximo número uno del mundo en el tenis.
En su autobiografía, Hitting Back, el ex tenista reveló que tiene imágenes “parchadas” sobre los recuerdos de aquel día, como recogió Infobae. Pero lo que sí viene a su mente son las canciones que cantaron para distraerse mientras afuera se desataba el infierno.
Número de 1 del mundo
Andy Murray se refugió en el deporte para mitigar los recuerdos. Y el tenis se convirtió en una parte muy importante de su vida. Al grado de practicarlo ya de manera profesional y mostrar una habilidad nata. El escocés se convirtió en una de las máximas glorias de su país y llegó a ser número uno del mundo.
Ganó 46 títulos, entre ellos tres Grand Slam: dos de Wimbledon y un US Open. El más especial fue ese que conquistó en Londres en 2013. El cual dedicó a su comunidad. Y fue un guiño hacia sus orígenes.
Campeón olímpico
Los buenos resultados no pararon en los torneos profesionales en los que participó. Pero el escocés también conquistó dos veces un logro que es muy pocos tenistas y deportistas pueden presumir: ser campeón olímpico.
Fue en las ediciones de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016 donde el tenista se colgó la medalla de oro, convirtiéndose en campeón en la modalidad de Singles. En la primera derrotó a Roger Federer. Mientras que en Brasil volvió a quedarse con el triunfo al vencer al argentino Juan Martín del Potro.
En sus últimos años, como profesional, Andy Murray y sufrió varias lesiones. Pero, sobre todo, una en la cadera le hizo perderse algunos torneos. Tras luchar por mantenerse en el máximo nivel, el escocés anunció su retiro después de su participación en los Juegos Olímpicos París 2024.
Hoy, sigue siendo entrenador y también aprovecha su tiempo para pasar en familia. Como lo muestra en sus publicaciones en redes, donde comparte algunos fragmentos de su vida.