Luis Enrique Santander puede dar las gracias de vivir y pitar en México y no en África. El pasado fin de semana, el colegiado mexicano señaló un penalti inexistente en favor del Guadalajara durante el duelo que el “Rebaño Sagrado” sostuvo con los Tuzos del Pachuca y que causó gran polémica por la situación que atraviesan las Chivas en la tabla de cocientes.
Un error similar le costó seis meses de inhabilitación a su colega africano Rajindraparsad Seechurn, árbitro de Isla Mauricio que ese mismo día pitó una pena máxima inexistente en el duelo de cuartos de final de la Copa de África entre Guinea Ecuatorial y Túnez en perjuicio del cuadro tunesino. A causa de la marcación (que se dio al minuto 93), el partido se fue a tiempos extra con la consecuente eliminación del cuadro afectado.
La Confederación Africana de Futbol consideró desastrosa la decisión por haberle hecho “perder el control de los actores del partido en cuestión” y lo mandó a la congeladora con un castigo ejemplar.
Así pues, dos decisiones tomadas el mismo día tuvieron consecuencias muy diferentes para los silbantes que las protagonizaron. Qué bueno que no eres africano, ¿verdad, Santander?
