Por: Llanely Rangel
La alegría es redonda para los universitarios. Pumas suma triunfos en casa, Daniel Ludueña regresó a la cancha después de 11 jornadas fuera por lesión, Van Rankin y Matías Britos anotaron, y la ilusión por entrar a la liguilla crece.
Por si fuera poco, el equipo ligó su cuarta victoria consecutiva en la Liga MX, cosa que no conseguía desde el Clausura 2011. Cuatro años pasaron para lograr de nuevo esa hazaña. La alegría no cabe, menos después de meses en los que el equipo no encontraba la fórmula, parecía que era un conjunto integrado por jugadores completamente desconocidos.
Poco tiene que se dudaba de la habilidad de Guillermo Vázquez Jr. en el banquillo, en la cancha jugaban 11 futbolistas pero ningún equipo. Gerardo Alcoba alertaba “No podemos decir que estamos de regreso en el torneo, estamos empezando a buscar un rendimiento aún andamos lejos de lo que queremos. Nuestro primer objetivo es entrar a la liguilla; era algo lejano hace tres fechas, pero hoy estamos cerca”.
Es cierto que aún no funcionan de manera óptima, es verdad que nos gustaría más intensidad en la delantera, más acomodo en el centro del campo, pero poco a poco la plantilla empieza a mejorar e ilusiona. Quizá los malos resultados de meses atrás fueron sólo una pesadilla, porque hoy todo ha vuelto a caminar para que Pumas vuelva a ser Pumas.