Las normas de Heynckes que tienen al Bayern en semis de Champions

Por Eduardo Martinez

El regreso de Heynckes al Bayern Munich en octubre de 2017 ha sido puro aire fresco para el club bávaro. Lo convirtió en campeón de Alemania, finalista en la copa y como uno de los cuatro mejores equipos de Europa. El gran éxito se lo debe a seis normas que el entrenador puso apenas unos días después de su llegada.

Adiós celulares

Una dura norma, más para los jugadores que solían tomarse una selfie después de cada juego. El propósito es hacer que los jugadores convivan más en el vestuario y no estén pegados al teléfono.

Puntualidad

La neta muchos lo hacen sin querer, su reloj camina más lento o se les duerme el gallo. Para el entrenador alemán, estar a tiempo en los entrenamientos muestra el respeto hacia los demás y se puede llegar a tener una larga y mejor práctica.

Higiene y limpieza

De los punto más importantes para el veterano entrenador, porque ayuda a los jugadores a recordar de dónde vienen y olviden los lujos que les ha dado la élite mundial; de hecho, sus pupilos son los que recogen el vestidor después de cada entrenamiento.

Cortesía

Para el técnico cuatro veces ganador de la Bundesliga cualquier empleado del club debe ser tratado como cualquier persona, para que los jugadores no se sientan más que nadie y siempre mantengan los pies en la tierra.

Adiós grupitos

Pasó mucho durante la gestión de Ancelotti, se formaron los grupitos entre gente que hablaba el mismo idioma, pero cuando llegó Heynckes todo eso se acabó. Para que un club pueda ser fuerte debe estar unido y miren ahora.

Reunión de equipos

El míster alemán se lo ha llegado a exigir a varios de sus jugadores, en especial a la hora de la comida donde él cree que todos deben estar juntos para una mejor convivencia como grupo.

Por algo es la cuarta etapa que está al frente del Bayern, un técnico que con su mano dura ha logrado imponer orden y respeto, para salir campeones. Ahora hay que esperar para ver si lo llevan a su segunda Champions con los de Munich.