Para Miguel Layún lo más complicado de jugar en Europa es ganarse un lugar en la alineación, pues debe demostrar que tiene el nivel para ser titular y además dejar un imagen positiva para volver a ser elegido.
“Se sufre mucho. Lo vemos cada fin de semana. Nos podemos encontrar una situación como en la que Héctor era indiscutible el año pasado con el Porto o la fortuna que tenía yo para ganarme un puesto titular en el once la mayor cantidad de partidos con el equipo. Creo que estamos empezando a dar muestra que el jugador mexicano puede competir y se puede confiar. Ese proceso lo pasaron muchos países y nosotros lo empezamos a demostrar”, dijo en entrevista para ESPN.
También aseguró que todos sus compañeros mexicanos hacen su mejor esfuerzo para destacar y dejar una buena imagen de los jugadores de nuestro país y a su vez abrir más puertas.
“Andrés, Héctor, Chícharo, Tecate… a los jugadores que peleamos por eso nos está costando vivir una situación que esperemos otros compañeros mexicanos no la tengan que sufrir y que piensen en el jugador que viene por un lugar y que no necesite adaptación y todo eso se acorte, que sea para beneficio de nosotros y de selección”, afirmó.
Por otro lado, agregó que “soñaba y anhelaba una revancha en el futbol europeo, pero igual tengo que ser franco y a pesar de que soñaba con que el futbol pueda traerme cosas importantes, también he de confesar que no imaginé estar en Porto, compitiendo en una Europa League, a pocos días de enfrentar un clásico en Portugal. Con una temporada con la que estoy viviendo y tal vez el sueño, pero no lo imaginaba en este momento”.
Layún criticó el reglamento que existe en México, pues cree que hay reglas que no tienen un fin benéfico para los juveniles que salen de fuerzas básicas.
“Es importante que el jugador mexicano pueda aspirar a competir, pero lo más importante es buscar la medida que nos permita como jugador exigirte. Con la regla 20/11 se usaban a jugadores que no volvieron a aparecer en el futbol o aparecieron en la liga de ascenso. Situaciones que tal vez los clubes hacen por cumplir un reglamento y no por estar convencidos con el jugador”.
“Lo ideal es encontrar la manera en la que el jugador sintiera el compromiso desde temprana edad para competir con extranjeros, compañeros más grandes, jerarquías y con mil cosas que se encontrará un joven y de entender lo que debe de vivir y desarrollar para ser alguien importante y ocupar ese lugar. Cuando todo se pone en bandeja de plata tampoco es sano, porque se cae en un conformismo y no es bueno para nadie”.