El empresario mexicano Jaime Byrom encontró el negocio de su vida en el deporte… aunque no directamente, sino en forma de entradas.
Según información de Expansión, la empresa Match Hospitality, propiedad de Jaime y su hermano Enrique, cuenta desde 2007 con licencia exclusiva de FIFA para comercializar los boletos y paquetes para asistir al Mundial de futbol; tan sólo el año pasado, la compañía vendió 290,000 paquetes de viaje para de Brasil 2014. Además, comercializa paquetes para torneos de tenis del circuito ATP.
El acercamiento de este personaje con FIFA se dio poco antes del Mundial de México en 1986, gracias a la mediación de Guillermo Cañedo, hombre fuerte del organismo rector del balompié mundial por aquellos años.
Durante la pasada Copa del Mundo, celebrada en Brasil, Ray Whelan, cuñado de Byrom y director de Match Hospitality, se vio involucrado en un escándalo de reventa, por lo que fue detenido en Río de Janeiro. En aquella ocasión, Jaime salió en defensa de su pariente al afirmar que la policía brasileña estaba cometiendo un error al confundir la identidad de Whelan.
Además. Byrom añadió que el arresto de su cuñado se basó en el hallazgo de 82 boletos que se encontraron en una habitación de hotel, varios de los cuales eran, a decir del empresario, ya habían tenido lugar. Aunque Match Hospitality fue señalada por este caso, la justicia del país amazónico no pudo probar la culpabilidad de Whelan.