Mal y de malas con Dani Alves, pus el futbolista brasileño recibió otra muy mala noticia mientras continúa siendo investigado por presunta agresión sexual.
El exjugador de Pumas, se encuentra en prisión, luego de la demanda que levantaron contra él, misma que lo llevó a perder su puesto con el equipo mexicano, pues decidieron rescindir su contrato semanas atrás.
De acuerdo a la información de la prensa española, Joana Sanz, esposa de Alves, ya habría solicitado el divorcio, decisión que se da tras borrar las fotografías que tenía con el en sus redes sociales.
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Incluso, Joana Sanz habría solicitado ver al brasileño, pero él no habría aceptado dicha petición. Semanas atrás se informó de las distintas versiones que el deportista presentó ante la justicia, las cuales habrían sido para cubrir una presunta infidelidad.
Peeero, habrá que seguir esperando para conocer la resolución del caso legal del experimentado futbolista, quien de encontrarse culpable, deberá pagar caro su condena, y de no ser así, quedaría automáticamente en libertad.
Dani Alves, un preso más
Aunque pocos son los detalles que se saben sobre el presente del futbolista, los pocos que se han revelado indican que Alves es tratado como un preso más, pues no tiene ningún tipo de privilegios.
Incluso, se habla de que la semana pasada ya disputó su primera cascarita con los demás presos, mientras espera la resolución de su caso y saber si se mantendrá preso en Barcelona o podrá abandonar la cárcel, decisión que dependerá 100 por ciento del juez.
Sin duda esta situación le ha dado la vuelta al mundo, ya que en toda su carrera futbolística, no se supo de ninguna polémica de este tipo, y vino a presentarse justo en su etapa final a nivel profesional.
