Por Isaac Vázquez
Las mujeres de Chivas nos dieron una cátedra de cómo conseguir un campeonato, ejemplo que sus colegas hombres deberían seguir. Aquí les dejo estas seis virtudes que le debe aprender el equipo varonil a al femenil para ser campeones otra vez.
BAJO PERFIL
Las jugadoras no están en medio de los reflectores, ni tampoco la liga, esto les permite dedicarse a jugar fútbol y no a tirar rostro. En cambio, los del equipo de hombres son más divas que sus compañeras; al verse rodeados de fama y al ver sus nombres en el FIFA creen que es suficiente para ganar los partidos. Esa desatención de los medios y patrocinadores hacia la liga femenil causa muchas carencias, pero en este caso saca a relucir una virtud.
ILUSIÓN
El fútbol femenil apenas comienza. Las futbolistas tienen la ilusión de jugar en un estadio, con aficionados coreando sus nombres, ponen todo su esfuerzo para salir campeonas. Se les ve ese brillo en sus ojos al ver el pasto y un balón esperándoles. A diferencia del equipo de hombres que al ver ese mismo rectángulo verde miran un trabajo y un salario. No importa si acabas de conseguirlo, nunca puedes perder la ilusión.
VALOR
Difícilmente veías a una jugadora fingir una falta, no se arrugaban ante el juego de contacto, no escatimaban ante el dolor de un posible golpe. Si los hombres se rifarán el cuero en cada jugada como sus colegas mujeres la cosa sería diferente.
CORAZÓN
Su corazón y coraje les permitió echar fuera a sus archienemigas del América en semifinales; les alcanzó para inyectar power a sus piernas y darle la vuelta a un marcador adverso en la final. Si el equipo de hombres sigue de “pecho frío” y conformista no llegará lejos.
EL ORGULLO
Se ve luego luego que las chavas sí sienten el escudo, están conscientes de la responsabilidad de pertenecer al equipo más grande y representativo de México. No sólo juegan por ellas sino por los colores, por el escudo.
LA HISTORIA
Ellas tenían hambre de hacer historia, querían ser las primeras campeonas de la liga femenil. Que cuando se mire hacia atrás para entender el presente, sean sus nombres los pilares que sostengan al fútbol de mujeres. Entendieron el peso de sus acciones, quisieron sumarle la gloria de su campeonato a la leyenda que es el Club Guadalajara, el equipo de sus amores.