Una nueva era se aproxima para el mexicano Raúl Jiménez, quien, a pesar de encontrarse en rehabilitación, se mantiene atento del futuro de su equipo, el Wolverhampton.

Tras la despedida del polémico Bruno Lage, quien mostró “amor y odio” por el canterano del América, han comenzado los rumores sobre quién será su sustituto.

A pesar de que el conjunto del Sevilla se encuentra alistando su duelo de Champions League. Ha surgido el rumor de que su actual timonel, Julen Lopetegui, es uno de los candidatos.

El resultado de este duelo podría definir el futuro del timonel de los sevillanos, pues podría salir del club español. Pero eso sí, con una propuesta en mano por parte de la Premier League, así lo reveló MARCA.

Dicho medio señaló que los Wolves de Jiménez tienen al actual técnico sevillista en la mira para suplir al ya despedido Bruno Lage.

¿Por qué le conviene dirigir a Raúl Jiménez?

El club inglés es un banco de pruebas de Jorge Mendes, precisamente el actual representante de Lopetegui. Sin tiempo a decirle adiós al Sevilla, Julen puede encontrar nuevo destino.

Y es que uno de los problemas que afronta ahora mismo Monchi, en contacto directo con los gerentes del club, es la parte económica.

Decirle adiós al entrenador a mitad de temporada conlleva pagarle todo su sueldo íntegro del año en curso. Una cantidad que ya estaba asumida.

Lo que no estaba incluido en la partida de gastos era un sueldo para el posible nuevo entrenador, con Jorge Sampaoli como el mejor colocado.

El propósito principal es alcanzar un acuerdo económico con Lopetegui si termina llegando a un nuevo destino, tratando de ahorrar su finiquito en la mayor cuantía posible.

Se tiene previsto que Lopetegui logre un buen resultado en el banquillo del Sevilla en Champions League este miércoles.

Todo este asunto ha tomado tintes algo irreales por el hecho de mantenerse Lopetegui en el cargo y pudiendo dirigir un partido esencial para el futuro sevillista en Champions.

Con la clasificación en juego, además de muchísimo dinero por ese objetivo. Y encima ahora aparece un tercer actor en todo este embrollo queriendo firmar al propio Lopetegui. Con el objetivo de que se vaya a la Premier League a sacar al Wolverhampton del descenso, casi donde está el Sevilla. Una historia de banquillos terriblemente complicada.