El día comenzó con un ambiente tenso en Barcelona, y es que hoy se jugaban el todo por el todo para seguir vivos en la Champions League. Tenía que pasar un auténtico milagro, pues el Inter no le debía ganar al Viktoria Plzen.

Los dioses del futbol son caprichosos, y gracias al azar y al destino, el partido del Inter frente al Viktoria se jugaba antes que el del Barça y el Bayern. Y así es Juanáticos, el Inter de Milán venció 4-0 al Viktoria Plzen y manda al Barcelona a la Europa League.

Inter acabó con el milagro del Barcelona

A pesar de que el Viktoria aguantó como pudo durante varios minutos, el talento y calidad del Inter era superior. Y llegó el minuto 35; tras un centro tremendo, Mikhitaryan encontró el primer gol del partido. El Barça se ponía a rezar en ese momento.

Realmente el marcador era muy engañoso, porque el Inter era completamente superior y parecía que era cuestión de esperar para que los goles cayeran, y así fue. Pues en el 42′ Edin Dzeko clavó el 2-0. El sueño culé estaba llegando a su fin sin siquiera jugar su partido.

El segundo tiempo fue un tramite

Con las cosas prácticamente resueltas, el Inter se dedicó a defender su ventaja jugando con la pelotita de aquí para allá. El Viktoria Plzen ya sólo estaba esperando a que el partido terminara y el Inter no apretara para no llevarse una goleada de Italia.

Pero al Inter le bastaba con acelerar un poquito y tras un jugadón de los italianos, Lautaro le dejó la “bocha” servidita para que Dzeko firmara su doblete. El Inter de Milán le ponía el tercer clavo al ataúd del Barcelona que tenía un sólo rumbo, la Europa League. Inter le pegaba 3-0 al Viktoria.

Pero faltaba la cerecita del pastel; ya con Lukaku en cancha el Inter encontró el 4-0 fulminante, aplastante y contundente. ¡Qué golazo te rifaste, Lukaku!

Tras el cuarto gol, el Inter aflojó y ya no pudo encontrar otro golecito, pero la neta ya no era necesario. El Inter está en los octavos de final de la Champions League y manda al Barcelona a la Europa League. ¡Otro fracaso para el Barcelona y Xavi!