La clásica juanáticos; hoy en la semifinal de Copa MX entre Pachuca y Monterrey, se volvió a cumplir la mentada ley del ex y de forma dolorosa.
En el Estadio Huracán, la afición de Pachuca que se dio lugar para asistir al partido, recibió con aplausos y cariño al ahora técnico de Rayados, Diego Alonso, quien les diera su última liga y el último título de CONCACAF a los Tuzos.
El técnico uruguayo se vio en aprietos al terminar el segundo tiempo tras la expulsión de su central Nicolás Sánchez y el gol de Franco Jara que empataba el marcador. Tras una postura ultra defensiva en el segundo tiempo que dramáticamente fue evidenciada en la última jugada a balón parado del Chaco Giménez, el técnico terminó festejando en el Hidalgo pero esta vez, a favor del equipo rival, ese equipo que por cierto, le ganó la Copa MX hace un año en Monterrey.
Ni modo, juanáticos tuzos, esta es la ley de la vida. A tragar veneno…