Por Víctor Yahir Cruz
En Chivas consiguieron quedarse con el Pelado Almeyda, la mala es que tan mal lo trataron que el argentino ya no quiere estar en Guadalajara, aún así, el pobre sigue atado y no puede salir de esta, por eso pensamos en abrirle los ojos a De Anda, Higuera y compañía para que lo dejen tomar una decisión y así evitar una catástrofe.
poca atención al equipo
Si ya está más de fuerzas que de ganas, lo que buscará es salir lo más rápido posible, y la mejor forma es conseguir malos resultados para que lo corran. Así que el ver cómo va el equipo no sería su prioridad, todo lo contrario.
desunión en los jugadores
Si de por si ya no hay líderes en el equipo, con un pastor solo en cuerpo presente, el Rebaño se nortearía por completo, perdería el rumbo, y de a poco los problemas en el vestidor llegarían, cero cool en un equipo.
malos resultados
Los puntos anteriores serían suficiente detonante para hacer que las marcas negativas lleguen, aún es tolerable fracasar en la Liga MX, pero no te puedes dar el lujo de hacer el ridículo ahora que viene el Mundial de Clubes y representarás a tu país frente al mundo. Esto ya se está poniendo feo…
críticas de la prensa
Lo peor que le puede pasar a cualquier equipo es que la prensa se lo empiece a comer en grande, los chismes y los resultados mediocres distraerían aún más a todos y acabaríamos con el último punto.
el caos total
Regresarían aquellos fantasmas que se aparecieron en Verde Valle de 2012 a 2014, cuando el equipo pasó la peor etapa de su historia, veríamos al 'Gigante de México caer en un pozo sin salida', tal vez vuelvan a meterse en problemas de descenso, quizá Matías ya se haya ido para entonces, pero las heridas tardarían mucho en cerrar, el fracaso sería inminente.
¡Recapacita Chivas, recapacita ya, antes de que sea muy tarde!