Formica no quería venir a Pumas. Prefería quedarse en Argentina con Newell's, pero sabía que su salida le dejaría dinero al club y aceptó.
“En mi mente no tenía ganas de irme, acá soy muy feliz, pero es la segunda vez que le dejo dinero al club y quiero terminar de la mejor manera”, respondió el jugador después de el partido contra Belgrano.
Seguro que esta declaración no sentará muy bien a la afición de Pumas, pero seguro que con goles y buen juego terminará convenciendo a la afición de que es un jugador comprometido y profesional.