Julio César Chávez Jr. mostró su sorpresa luego de que su padre, Julio César Chávez, lo criticara por romper la concentración y por andar en malos pasos. El boxeador explicó que dejó los entrenamientos porque fue a checarse el talón, además para visitar a su familia.
“No sé qué pasó, no sé por qué dijo eso, yo bajé de Big Bear a Los Angeles a checarme el talón, de ahí me fui a correr a Santa Monica, aproveché para ver a mi hija y ya voy de regresar a hacer sparring porque ya me siento muy bien del talón, quizá se enojó porque no hago las cosas como él quiere, pero lo respeto porque es mi padre, pero ya tengo 30 años”, dijo Chávez Jr. para ESPN.
Chávez Jr. aseguró que las palabras de su papá solamente son para ejercer presión, ya que él no está haciendo cosas malas.
“Ya no soy un niño, tengo 30 años, lógicamente yo sé lo que me hace bien y lo que me hace mal, sé que si hago algo malo el único que la va a pagar soy yo, no soy tonto ni he estado entrenando sin fecha ni pelea por más de un mes en Big Bear”, agregó.
Finalmente, Julio César afirmó que se siente listo para su próxima pelea contra Badou Jack, la cual tentativamente será el 30 de abril en Texas.
“Estamos a dos meses, vamos a ir cortando ya el peso para no tener problemas, pero estamos en tiempo y forma, por eso me sorprende todo lo que dice mi papá, estoy entrenando y no ando en malos pasos”, dijo.
Por su parte, Julio César Chávez rectificó en Facebook las palabras que dijo a su hijo, y agregó que aunque él ve mal lo que está haciendo, siempre lo apoyará.