Por: Roberto Quintanar
Pocos programas de televisión han tenido un impacto cultural tan profundo como Sesame Street, emisión que se ha mantenido al aire por más de cuatro décadas con un éxito rotundo.
La primera emisión de esta serie fue transmitida el 10 de noviembre de 1969 por la National Educational Television, que después se transformaría en la cadena PBS (Public Service Broadcasting), la televisión pública de los Estados Unidos.
Con su semilla germinada en la TV pública, Sesame Street fue un programa concebido con la finalidad de, a decir de sus creadores Joan Ganz Cooney y Lloyd Morrissett, “dominar las cualidades adictivas de la televisión y hacer algo bueno con ellas”, dirigiendo su atención a la educación de los niños.
Para cumplir esta misión (que los infantes aprendan a contar, el abecedario, los colores y un largo etcétera), la emisión se vale de conocidos sketches con títeres, dibujos animados y secciones con actores. Con esos recursos ideados por los productores, el éxito estaba garantizado: no sólo se trataba de educar, sino de educar divirtiendo, algo que suena más sencillo de lo que es en realidad pero se consiguió con creces.
Por supuesto, la activación física y la promoción de la actividad deportiva es una de las misiones de este programa. Así pues, por Sesame Street han desfilado personalidades como el futbolista David Backham, el manager Joe Torre, los basquetbolistas Julius Erving y Kobe Bryant, los Harlem Globetrotters y la tenista Venus Williams. Aquí vale la pena hacer un paréntesis para recordar que la primera figura del deporte invitada a hacer un sketch en la emisión apenas unas semanas después de iniciada fue nada menos que Jackie Robinson, el beisbolista afroamericano que en 1947 rompió la barrera del color en las Grandes Ligas.
En general, el mensaje de los deportistas que han aparecido en Sesame Street lleva dos aristas: fomentar la práctica del deporte entre los niños para que éstos gocen de una buena salud e incentivarlos para que nunca se den por vencidos en cualquier actividad que realicen en su vida, sea patear un balón o aprender el abecedario.
Más allá de su éxito, Sesame Street ha tenido que licenciar a algunos de sus entrañables personajes para continuar ofreciendo producciones de alta calidad y cumplir las expectativas de su audiencia. Justo fue ese el motivo por el que se han producido varios videojuegos basados en la serie… y no podía faltar uno en el que Elmo, el Monstruo Come-Galletas y Abelardo se convirtieran en atletas. “Sesame Street Sports” apareció en 2001 para las consolas Game Boy de Nintendo y Playstation de Sony, aunque su popularidad no llegó a ser el que se esperaba.
El cumpleaños 46 de la emisión llegó en una época llena de dilemas y cuestionamientos. Hace apenas unos meses, la serie comenzó a transmitir sus episodios premier a través de HBO. Este movimiento, que no implicó su salida de PBS como se llegó a especular (la cadena pública tendrá los derechos de los capítulos de HBO ocho meses después de su estreno), tuvo el objetivo de que Sesame Street sobreviviese a una crisis financiera por la que atravesaba desde hacía tiempo. A pesar de esta justificación, las críticas no se hicieron esperar y pronto se cuestionó la calidad moral de los productores actuales y se habló de que había otras medidas que pudieron adoptarse para evitar que el programa se convirtiera en un producto a explotar por parte de una poderosa empresa.
A pesar de todo, y con la esperanza de que algún día regrese a sus orígenes alejados del lucro… ¡larga vida a Sesame Street!