“Tenemos que ocuparnos del juego y no de la política”, dijo Platini como si la sola frase no fuera ya un lenguaje de campaña. “Conmigo no habrá política. Conmigo todo será futbol y no política”, prometió reiteradamente.
Platini reconoció que pudo haber dicho a dirigentes estadounidenses que votaría por la candidatura de Estados Unidos, pero cambió de idea. Reiteró que no hubo nada preacordado con Catar. “Sarkozy nunca me pidió que votase por Catar, pero sabía que sería positivo”.
A medida que la campaña electoral para la presidencia de la FIFA se acerca cada candidato saca sus mejores armas, el príncipe Ali bin al-Hussein, de Jordania ha criticado abiertamente “los acuerdos políticos” en dicho organismo. Por lo que Platini aprovechó para prometer que sería uno de sus aportes si es elegido. “Voy a restablecer la imagen de la FIFA. Una buena FIFA es como un buen árbitro; nadie habla de él”, comentó.
Por último aclaró que no todos los miembros que trabajan actualmente en el organismo son delincuentes: “Hay muy buena gente en el comité ejecutivo. Sólo hay unos pocos corruptos”.