Y es que si no vieron el partido, México se fue perdiendo al descanso por un gol a cero y aunque terminó goleando a Fiji por 5-1 terminó molesto con sus dirigidos y hasta dijo que les faltó anotar más goles.
Luego, más tranquilo, el Potro aseguró que todo fue un problema de tranquilidad, ya que después del gol de Fiji, el equipo no se pudo conectar, específicamente en el primer tiempo.
Y por si fuera poco, nos recordó una frase tan trillada, que hasta parece que la sacó del libro “Frases de técnico para después de un partido”: “El futbol nos recuerda que no hay nada seguro, nada escrito”.
Bueno, por lo menos después le echó flores a sus futbolistas: “Tengo jugadores que son muy inteligentes, receptivos y eso facilita”.