Por: Roberto Quintanar
El Estadio Rommel Fernández es otro territorio que hace tiempo no es conquistado por el Tri. En sus últimas visitas a Ciudad de Panamá por eliminatorias, México no ha podido salir con los tres puntos, aunque tampoco ha sido derrotado, sumando dos igualadas (1-1 y 0-0, en el camino a Alemania 2006 y Brasil 2014).
La última vez que que la Selección salió con los brazos en alto del país canalero se remonta hasta el 16 de julio del 2000, cuando el cuadro entonces dirigido por Manuel Lapuente venció por la mínima diferencia con un gol de Miguel Zepeda al minuto 88.
Esos eran, definitivamente, otros tiempos. Las aspiraciones panameñas podían verse resumidas en los titulares de la prensa al día siguiente del partido: “Asustamos al gigante”.
Ahora ya no sólo quieren asustar al gigante. 16 años y varios polémicos y duros juegos después, Panamá está luchando con algo más que el corazón por llegar al Mundial de Rusia 2018.
Una nueva estadística se atraviesa entre Juan Carlos Osorio y la historia. Ya rompió dos maldiciones; ahora buscará terminar con otra, mucho menor, pero significativa.
