Por Rubén Ramos
En diciembre pusimos el grito en el cielo al saber que el sorteo nos puso en el mismo grupo de los campeones del mundo. Desde aquel día los comentarios negativos no se han hecho esperar. Muchos aseguran que nos va a ir de la patada, que será el peor Mundial de la historia. Hay un personaje que ve las cosas a la distancia y no se confía, sobre todo porque sabe que si nos motivan en lo mental somos un peligro.
DONALD TRUMP
El presidente de Estados Unidos nos ha pegado en el orgullo. Sus constantes comentarios llenos de descalificaciones contra los mexicanos son molestos. El karma ya les tocó porque su país no irá a la Copa del Mundo. Nuestros muchachos llegan a Rusia con la mentalidad de callar esas bocas que nos hacen ver como un país en decadencia. Esas ganas pueden ser importantes para competirle a los alemanes.
GUILLERMO DEL TORO
Las estatuillas ganadas del cineasta mexicano nos hicieron sentir orgullosos de su esfuerzo por llegar ahí. Es una muestra de que también podemos salir ganadores contra los mejores del mundo. Eso lo podemos transmitir al futbol, no es imposible lograr los tres puntos en el primer partido. Memo, nos vino a levantar el ánimo.
LA HISTORIA
Hemos visto grandes partidos de la selección en Mundiales. Se le ha empatado a los italianos, se le ha ganado a los franceses y hasta se le sacó un punto al pentacampeón mundial en su casa. Siempre nos quedamos como el ya merito. Löw sabe que los paisanos querrán dar un golpe de autoridad contra su equipo. La manera tan contundente con la que se calificó a Rusia también será un ingrediente más a nuestro favor.
EL BOOM DE LO MEXICANO
El cine ha sido parte importante del resurgimiento del espíritu mexicano. Si bien Coco no es hecha en nuestro país, se enfoca en tradiciones y personajes de nuestra cultura. Eso fue suficiente para que millones se dieran cuenta de que como México no hay dos.
MÉXICO UNIDO DESPUÉS DE LOS SISMOS
El año pasado la tierra nos sacudió gacho. Tristemente ese movimiento se convirtió en tragedia. Edificios caídos, hambre, muerte. Desde ese momento no fuimos los mismos. Nos hicimos más fuertes como sociedad porque eso nos unió en busca de levantarnos del golpe. El mundo nos ayudó, pero también nos aplaudió por ver la capacidad de reacción que tenemos para plantarle cara a lo que asusta o da miedo.