En lo que llevamos del torneo ha existido ese comparativo entre las aficiones de América y Cruz Azul sobre quién mete más gente. Los partidos del Azul han superado a los de su rival en cuanto a asientos ocupados, pero el clásico contra Pumas será distinto.
Lo triste para los Ames es que eso será provocado porque los del Pedregal se meterán al Azteca y eso es garantía de un lleno, así ha sido en los últimos años. Como muestra de eso es que dos de las mejores entradas el torneo pasado se vivieron en la fase regular junto con la liguilla, cuando los de Patiño visitaron a los del Piojo.
La afición águila seguramente no está nada contenta con el desempeño del equipo contra Querétaro y la derrota en León, así que es probable que castigue a los suyos en las tribunas. En cambio, siempre fieles en las buenas y las malas, los auriazules abarrotarán el estadio.