Por Iván Figueroa
Aunque la MLS ha evolucionado en los últimos años, la verdad es que siguen siendo hijos de la Liga MX, no importa si hacen un torneo de ensueño y derrotan a los más poderosos oponentes, siempre que se topan a los mexas en la final el resultado es el mismo. Además de los partidos con estas opciones nuestra poderosa Liga MX puede reforzar la paternidad con los vecinos del norte.
LA FINAL SIEMPRE SERÁ EN SU CANCHA
Para que no digan que abusamos y que queremos portarnos como Conmebol vamos a dejar que los partidos de vuelta se jueguen en canchas gringas para que no crean que tenemos ventaja en el cierre. ¡Ups! América ya les pegó coronándose de visitante.
JUGAREMOS SIN REFUERZOS EXTRANJEROS
Les daremos la posibilidad de enfrentar a un equipo con puros jugadores mexicanos, para que no tengamos ninguna ventaja al alinear talento extranjero que pueda marcar diferencia. Otra vez, ya lo hicimos, lo sentimos.
CAMBIAREMOS LOS COLORES DE LA COPA
Para ahorrar tiempo, el trofeo ya vendrá con los colores de nuestra bandera, total que siempre se queda en suelo azteca y las finales son de mero trámite administrativo.
renombraremos el TORNEO
Liga México Campeón e invitados de Concacaf puede ser el nombre del torneo, porque desde que empieza ya todos saben que pase lo que pase los mexas se van a quedar con el trofeo.
MANDAREMOS AL EQUIPO MÁS DÉBIL A LA FINAL
Para nivelar las cosas pondremos al equipo que vaya peor en el torneo de liga a medirse con los poderosos equipos de la MLS. ¡Ups! también ya lo hicimos, este año el penúltimo lugar de la tabla le ganó el título a su campeón.