Por Anton Villalpando
Si en algo se parecen los equipos de futbol a los políticos es en que tienen una personalidad muy marcada. Pensando en esto y justo ahora que la Liguilla está por comenzar, al igual que las campañas políticas rumbo al 2018, por qué no hacer un ejercicio divertido: comparar a los clubes de la Liga MX con diversos personajes de la política.
López Obrador = Cruz Azul
“Este es su año” “Ahora sí se llevan la grande”… Todos sabemos en qué terminará la historia, lamentablemente para sus seguidores, ni el Peje se lleva la presidencia, ni Cruz Azul la Liga MX.
Gabriel Quadri = Atlas
Las probabilidades de que Quadri gane la presidencia y que Atlas vuelva a ser campeón, son directamente proporcionales a que México levante la Copa del Mundo… conmigo como titular.
Aunque seamos sinceros, ¿a quién no le cae bien Quadri y su famosa combi? ¿Quién no disfruta ver un partido del Atlas y su academia del buen futbol? Son de esos personajes que te dan ternurita y hasta sientes que los quieres.
ELBA ESTHER GORDILLO = TOLUCA
Hasta hace poco daban ¡miedo, terror, pánico! Sabías que se llevaría todo lo que estuviera a su alcance y no le dejarían nada a nadie. Ahora viven de “sus rentas” pero su poderío se fue apagando cada vez más, hasta ser un feo recuerdo.
Pedro KumamotO = Lobos BUAP
Son los más jóvenes del grupo. Se atrevieron a faltarle el respeto a la máxima cúpula de poder -las televisoras y los partidos políticos-. Son arriesgados, tienen ideas nuevas, y aunque carecen de un presupuesto y apoyo tan grande como lo tiene el resto, están dando de qué hablar en todo el país.
FELIPE CALDERÓN = PACHUCA
Sólo necesitan unas cuantas copas para comenzar a decir que son los salvadores de México, que gracias a ellos todo ha evolucionado y que si no fuera por su trabajo estaríamos en el hoyo.
La verdad es que ni tanto que queme el santo, ni tanto que no le alumbre. Calderón hizo algunas cosas rescatables y otras muy cuestionables; mientras que Pachuca ha trabajado cosas brillantes, pero le falta mucho para ser un equipo grande.
Enrique Peña Nieto = Chivas
Sus seguidores los idolatran, creen que no hay alguien más guapo -o mexicano- que ellos. Sus últimos logros han sido bastante cuestionables. Sin duda, todos los que no profesamos amor por ellos, no encontramos a alguien mejor para reírnos de todas sus torpezas y burradas, mientras que los chillahermanos y los peñabots salen en su defensa.
Donald Trump = América
Los has mandado a chi…. a su mamá cada que puedes, nadie entiende cómo tienen seguidores. Su trabajo está lleno de asteriscos, no hay persona en el país que pueda opinar algo positivo de ellos, sin sentir ganas de vomitar. Por si fuera poco, los mexicanos no les importan a menos que puedan ayudarles a cumplir con sus objetivos.
Además cumplen con una máxima en común: o los odias o los amas.
Niño en el senado = Tigres
Es una bonita costumbre que en muchos países del mundo cuando llega el Día del Niño, los invitan a tomar los curules y a participar en las decisiones importantes del país.
Muchos de estos niños suelen ser brillantes e incluso tener propuestas más sobresalientes que cualquiera que trabaje el resto del año en esta vital labor. La verdad es que los niños no dejan de ser chiquitines por muy brillantes que sean y los Tigres por más presupuesto que inviertan y campeonatos que ganen, no dejarán de ser muuuuy chiquitos.