Si se pudo, juanáticos. Aún con todo en contra, México logró sacar un resultado histórico al derrotar a Alemania, y como todos sabemos, por cada sonrisa hay una lágrima, por cada victoria hay una derrota.
En esta ocasión a los germanos les tocó sufrir al mayoreo, y por ende, ni siquiera los cracks equipo supieron llevar la situación. Uno de ellos fue Toni Kroos, quien tuvo un juego muy discreto, prácticamente no apareció en el partido.
Parecía que el del Real Madrid sacaría las papas de un fuego que se cocinaba de a poco, pero apareció Héctor Herrera para dar probablemente el juego de su vida al anular por completo al cerebro de la Mannschaft con recorridos y presión excelsos.
Kroos intentó de pelota parada y por poco y se sacaba la espina con un golalazo, hasta que la mano milagrosa de Memo Ochoa se atravesó. La desesperación lo llevó a tirar de media distancia pero ni así la armó.
Fue así como el tiempo pasó y la poca creatividad de los alemanes, junto al baile de antología que Héctor Miguel le metió a Toni, acabaron con las esperanzas de un posible empate y también de un buen partido del alemán.
A ver si con el partidazo de Herrera, Kroos se pone las pilas y se lo recomienda a Florentino para que el Madrid lo fiche. Dicen que tener al enemigo de tu lado es lo mejor que puedes hacer. Esta sería una buena oportunidad para comprobarlo.