Es cierto que Javier Hernández no está pasando por su mejor momento. Peeeeero, esta semana el Bayer Leverkusen sufrió un doble golpe: primero, la suspensión por cuatro meses de Hakan Calhanoglu y ahora, deberá enfrentar su próximo partido de Bundesliga frente al Hamburgo, también sin Chicharito.
La lesión del mexicano es una baja sensible para el cuadro de las aspirinas, por lo que se me ocurrieron varias razones por las cuales el Leverkusen lo va a extrañar… Y yo, también.
1.- Ya rompió la racha negativa
El gol a veces es caprichoso con los delanteros. Me consta que Chichadios buscó romper su mala racha de cualquier manera y aunque estuvo 1,400 minutos sin poder meterla -o sea, la pelota en el arco, no piensen mal-, por fin mi Chicha logró anotar un gol después de tres meses. Y, para como son los goleadores, seguramente regresará para aportar una cuota importante de goles para el Bayer. Aunque, por hoy, los alemanes deberán de resolver el partido sin él.
2.- también funciona de cambio
Si hay algo que catapultó la carrera de Javier en Europa, fue justamente entrar de cambio en los segundos tiempos del Manchester United y el Real Madrid, para anotar goles importantes. La velocidad del delantero mexicano explotaba a las defensas rivales y creaba peligro para su equipo. Varios de sus goles en Europa se han dado entrando de cambio y hoy, no tenerlo ni siquiera en la banca, es una desventaja para las aspirinas.
3.- El Bayer anota poco
En los últimos 10 partidos del Leverkusen, el conjunto alemán solo ha logrado anotar 16 goles. La mitad de ellos fueron anotados por mediocampistas o defensas y los únicos delanteros que han logrado meter más de un tanto en estos partidos, son Hakan Calhanoglu (3 ) y Julian Brandt (2). Y ahora, sin el poder de Chichadios, la cosa se complica para el Bayer.
4.- Porque todos lo amamos
Es difícil no amar a Chicharito: por su carisma, su carácter, su sonrisa y sus goles. ¿Apoco no? Es un futbolista que ha dejado grandes amistades en su paso por distintos clubes y que se ha ganado el respeto de sus rivales. No importa si es su rival es América, el Atlético de Madrid o el Bayer Münich. Todos lo extrañamos, aunque en el Hamburgo deben de estar más tranquilos de saber que Javier no jugará hoy con el Leverkusen.